Se acerca la navidad y con ella días de fiesta, encuentros y celebración con lo que inevitablemente vamos a pasar muuucho tiempo alrededor de una mesa junto con nuestros seres más queridos. Puede que a muchos de nosotros nos preocupe o nos suponga un problema si nos encontramos en un proceso de control del peso o bien tenemos un problema de salud ligado a la alimentación. Si te sientes identificado y te preocupa no poder seguir una alimentación equilibrada en situaciones especiales, respira hondo, hoy te traigo algunos consejos que pueden ayudarte a disfrutar de las comidas y cenas navideñas sin necesidad de excederte o acabar empachado.
- Evita cocinar más cantidad de la cuenta, de esta manera no quedará nada al día siguiente y podrás retomar fácilmente tu rutina saludable.
- ¡No te saltes ninguna comida! El típico “Hoy me salto el desayuno o la comida porque está noche me voy a pasar” no es para nada una buena estrategia ya que puede que tengamos tanta hambre que comamos descontroladamente. Es preferible que continúes con tu rutina habitual y si lo deseas prepara alimentos ligeros. De esta manera llegarás con menor sensación de hambre a las comidas principales y evitarás la ansiedad por la comida y el consecuente “picoteo” de alimentos poco o nada nutritivos.
- ¡Controla las raciones! Intenta comer la cantidad justa que comerías un día normal y ten presente la imagen del método del plato saludable que te mostré en publicaciones anteriores, en la que la mitad del plato está representada por verduras, ¼ proteína (carne, huevos, pescado, legumbres) y el ¼ restante hidratos de carbono (pan, pasta, arroz, mijo, cereales, patata, yuca…).
- Come hasta que te sientas saciado y cuando lo estés, ¡para de comer! Así evitaras el malestar tras una comida copiosa, teniendo en cuenta que no solo va a ser una comida si no varios días de comidas y cenas con abundantes platos exquisitos.
- Come despacio y mastica bien los alimentos.
- Elige aquellos entrantes que vas a tomar y ponlos en un plato de postre. De esta manera serás mas consciente de la cantidad de alimentos que vas a ingerir y evitarás comer mas de la cuenta.
- Evita el picoteo mientras cocinas, y si lo haces, opta por vegetales como las zanahorias, pepino, tomates cherry o una pieza de fruta.
- Prepara entrantes ligeros tipo ensaladas, verduras asadas, espárragos blancos o trigueros, marisco, carnes magras. Evita los embutidos y quesos más grasos. En lugar de patatas chips o patés pre cocinados, opta por los crudités de verduras (zanahoria, pepino, calabacín, apio, pimientos de colores, tomates cherry) para acompañar humus o paté casero.
- Opta por las preparaciones sencillas (horno, vapor, plancha) y evita las frituras, rebozados y salsas. Acompaña los platos principales de verduras y hortalizas.
- De postre, dale preferencia a la fruta como por ejemplo la piña que además de tener un sabor dulce delicioso y muy pocas calorías, en su composición contiene enzimas proteolíticas que facilitan la digestión.
- ¡Momento turrones! Por su puesto que los podemos comer, mi consejo, elige aquellos menos procesados ya que serán menos calóricos. Compra 1 o 2 tipos, pero no te vuelvas loco/a comprando turrones para meses que la navidad dura apenas unos días. Si eres cocinillas, puedes probar de prepararlos tu mismo, si es así, te invito a que eches un ojo al apartado recetas de esta web ¡Sírvelos en un plato de postre y una vez haya finalizado la comida, evita tener los dulces a la vista!
- Para beber, elige el agua como bebida principal, puede ser también agua con limón o con gas. Evita los zumos o bebidas con gas azucaradas. En cuanto al alcohol, además de ser perjudicial para la salud, aporta calorías vacías así que, si decides tomarlo, intenta no abusar de él o dejarlo únicamente para él brindis.
- Acompaña la sobremesa con infusiones digestivas.
- Al día siguiente, retoma tus hábitos saludables. Para ello, te recomiendo evitar tener las sobras del día anterior en casa.
- ¡Muévete! Sal a pasear, aprovecha los trayectos en los que puedas ir a pie y continúa con tu rutina de ejercicio habitual.
- Recuerda que lo importante en estas fechas no es la comida si no reunirnos con amigos y familiares para compartir momentos, recuerdos y alegrías.
Nutre tus hábitos con salud, amor, equilibrio y armonía. ¡Felices Fiestas!